El secretario General de los trabajadores de la Energía y Adjunto de la CTA de Pablo Micheli, se quejó por la firma de los $8.000 con respecto al salario en el Consejo que regula el monto básico de los sueldos. “Es una vergüenza”, sentenció.
El Secretario Adjunto de la CTA Autónoma, José Rigane, estuvo junto a Pablo Micheli titular de la central, en la Casa Rosada en la reunión donde se debatió el Salario Mínimo Vital y Móvil. Rigane manifestó que las dos CTA votaron “negativamente por el Salario Mínimo Vital y Móvil”, que estableció el basico en 8 mil pesos. “Estamos en desacuerdo con que los trabajadores, que tendrían que estar ganando no menos de 16.000 pesos por mes, se les da un aumento irrisorio y que recién es para enero de 2017”, se quejó el dirigente marplatense.
Rigane agregó que “el SMVyM hoy está en $6.060, en julio llegará a $6.810, en octubre a $ 7.560 y en enero de 2017 va a llegar a $8.060. “Esto es una vergüenza, cuando los tarifazos fueron de una sola vez en la luz, el gas, el transporte, el agua y hay que sumar el proceso inflacionario y la devaluación. Además, las retenciones a la minería se la quitaron de una sola vez, al agro le quitaron las retenciones de una sola vez, entre otros beneficios a los sectores concentrados de la economía”, argumentó el secretario general de la FETERA, al abandonar la Casa de Gobierno.
“El Salario Mínimo Vital y Móvil debería estar 16.000 pesos. ¿No se puede? Bueno, paguen 9.000 pesos como mínimo para comenzar a caminar, pero en una sola vez. Pero no esto que es una verdadera verguenza”, repitió. “A este acuerdo se llega porque los empresarios se pusieron de acuerdo, porque el gobierno termina llevando todo en esa dirección y porque el resto de los dirigentes sindicales de la CGT también lo aprobaron. Entonces, en este contexto tripartito, nosotros tenemos la minoría”.
Y agregó que “lo que se votó afirmativamente es el seguro de desempleo, que estuvo muchos años en 400 pesos y ahora quedó en 3.000 pesos. Es un paso, no es lo que realmente se necesita”.