El 20 de febrero los metrodelegados denunciaron asbesto en los trenes nuevos que había comprado la Ciudad a su par de Madrid, en 2013.
Y Pianeli y el resto de los Metrodelegados tenían razón. Había material cancerígeno en los vagones nuevos del subte de la Línea B –adquiridos por parte de Ciudad a Madrid, en 2013-. La tozudez impidió tomar una determinación a tiempo y hoy el Gobierno de la Ciudad debe retirar unidades de circulación.
Sbase, empresa concesionaria del subtearraneo, fue advertida por el sindicato que lidera Roberto Pianeli (también el GCBA), pero aun así, la compra se realizó y los trenes fueron puestos a rodar. Meses después, asbesto fue encontrado en el material.
Archivo Sonido Gremial: nota publicada el 20 de febrero de 2018.-
Los metrodelegados expresaron su solidaridad con los trabajadores del INTI