🔵El secretario general del Sindicato del Vidrio celebró la victoria de Fuerza Patria y la derrota del oficialismo en la provincia de Buenos Aires. Aseguró que “empieza a haber justicia” y que se recupera “la mística del peronismo en la calle”🔴
El secretario general del Sindicato de Obreros de la Industria del Vidrio, Horacio Valdéz, planteó un análisis tras el triunfo de Fuerza Patria en la provincia de Buenos Aires, al que calificó como un punto de inflexión frente al Gobierno nacional.
“Empieza a haber justicia y empezamos a recuperar el peronismo en la calle, sin dudas. Hemos recuperado la mística. Fue muy importante”, celebró el dirigente sindical.
Para Valdéz, el resultado marca un antes y un después en la relación del Gobierno con la sociedad. “El día de mañana va a ser mucho más difícil para La Libertad Avanza, porque siguen los problemas de la corrupción, siguen los problemas de la salud, siguen los problemas en la educación, porque sigue la falta de presupuesto para todos y creo que es un castigo a la motosierra, a la licuación salarial, a todo lo que nos viene sucediendo y las clases medias empezaron a dar cuenta a qué sector pertenece”, sostuvo.
En ese sentido, el dirigente advirtió que el triunfo no debe adjudicarse a nombres propios. “Este triunfo no es de Axel Kicillof o de los referentes más importantes. Este es un triunfo del pueblo que está padeciendo políticas adversas y que me parece que hay que volver a encarrilarla”. Finalmente, Valdéz proyectó la necesidad de construir una alternativa nacional con identidad peronista. “En la próxima que tengamos el proyecto nacional y popular que es el peronismo y que lleve esperanza a la gente que es con lo que todos sueñan. No vamos a cambiar en 24 horas todo, pero sí por lo menos empezamos a caminar de vuelta hacia un destino común que nos proteja a todos. Que el peronismo ubicado en el poder siempre es el que armoniza los intereses de todos los sectores sociales. Que apostemos una vez más a dar una oportunidad”, cerró.
Más allá de las palabras de Valdéz, el resultado bonaerense se lee como un verdadero revés para el Gobierno. La provincia concentra casi el 40% del padrón nacional y ganar allí es clave para sostener poder político. La derrota de La Libertad Avanza y sus aliados del PRO expone un desgaste acelerado de la gestión de Milei: el voto opositor estuvo motorizado por el rechazo a la recesión, la licuación salarial y la falta de resultados económicos.