Finalmente, los docentes aceptaron la propuesta de la provincia de Buenos Aires y el conflicto se cierra con algunos puntos inconclusos, como ser el futuro inmediato de las condiciones laborales o bien la cercanía de la próxima paritaria, en noviembre. Ambos llegan con los ánimos desgastados, y con una elección a la vuelta.
El secretario general de Suteba, Roberto Baradel, consideró que “no existió la voluntad de diálogo ni de negociación” por parte del Gobierno de la provincia de Buenos Aires. La propuesta aceptada implica una consolidación salarial de 24% para el 2017, porcentaje que se le debe sumar un 3,4% por la incorporación de dos sumas fijas a cuenta de futuros incrementos paritarios que se abonaron en marzo y mayo y que no serán descontados, más otros dos pagos de 800 pesos en agosto y octubre, con lo cual se eleva a un 27%.
El Frente de Unidad, que integran Suteba, FEB, UDA, Sadop, Amet y Udocba consideró que hubo una “aceptación crítica” de la propuesta salarial presentada por el gobierno de provincial del 27,4 por ciento y advirtieron que continuarán las exigencias para que sea devuelto el dinero descontado de los haberes de los maestros por los días de huelga. El gremio docente aseguró que aceptó la oferta de aumento “de bolsillo” después de 120 días extensos de conflicto.
“Se acepta críticamente esta propuesta porque hubiéramos preferido que la oferta sea mejorada. No existió la voluntad de diálogo ni de negociación, sino que (el gobierno provincial) confrontó con los docentes y atacó fuertemente a los dirigentes sindicales. Ese no es el camino”, señaló el titular de Suteba, Roberto Baradel.
Asimismo, el secretario del sindicato docente precisó: “El gobierno nos acusó de hacer política partidaria y son ellos quienes lo hicieron. La gobernadora decía que no había un peso más, ¿por qué ahora está el dinero? El dinero estaba desde siempre, pero ellos apostaron a una propuesta salarial a la baja”.
Por su parte, la presidenta de la FEB, Mirta Petrocini, destacó que “a través de la lucha se pudo perforar el techo salarial del 17% inicial que pretendía instalar el gobierno, consolidar un incremento al básico de un 24% que perciben también los jubilados y un aumento de bolsillo del 27,4%”.
Según los gremios docentes, la propuesta aceptada implica una consolidación salarial de 24% para el 2017: un 21,5% en dos tramos, más un 2,5% de recupero por la pérdida del poder adquisitivo de 2016. A esto debe incluirle un 3,4% por incorporación de dos sumas fijas a cuenta de futuros incrementos paritarios que se abonaron en marzo y mayo y que no serán descontadas, más otros dos pagos de 800 pesos en agosto y octubre que aporta la Nación para compra de material didáctico, por lo que el incremento se eleva a 27,4%. A la su vez, supone la activación de la cláusula gatillo acorde a la suba de la inflación y el compromiso para comenzar en noviembre la negociación salarial de 2018.