🔵Guillermo Moser, titular de Luz y Fuerza advirtió sobre el futuro político y social de Argentina y el impacto de la ley Bases🔴
Movilizado junto a las columnas que desfilaron por el centro porteño el 1º de Mayo, Guillermo Moser, secretario general del sindicato Luz y Fuerza, lanzó un llamado a la necesidad de un cambio legislativo en el país, apuntando a la importancia crítica de “ganar el Senado” para asegurar un futuro estable para Argentina.
Moser expresó que el progreso y el futuro de una nación no se aseguran únicamente con la aprobación de leyes, sino mediante la fortificación de pilares básicos como la educación, la salud y, sobre todo, el trabajo. “No es como se dice que hay que aprobar las leyes para tener futuro, un país tiene futuro cuando tiene educación, tiene salud, trabajo, hoy lo que falta es trabajo”, afirmó.
Moser también resaltó el rol vital que juegan las organizaciones gremiales en la prestación de servicios esenciales para los trabajadores y sus familias. Enumeró beneficios proporcionados por el sindicalismo como capacitaciones, obras sociales, casas para estudiantes del interior y colonias infantiles. “¿Quién nos da todo eso? Las organizaciones gremiales”, destacó, señalando que cada vez más personas, incluidos los monotributistas que antes optaban por prepagas, se están afiliando a la obra social del sindicato –OSFATLyF.

El dirigente de la CATHEDA también criticó duramente a algunos diputados por su falta de apoyo a los trabajadores, mencionando que, aunque pronuncian largos discursos, en la práctica votan en contra de los intereses de los trabajadores. “Lo tienen que entender los diputados, que hacían discursos de media hora y levantaron la mano en contra de los trabajadores”, lamentó Moser.
En su crítica a la propuesta Ley Bases, Moser advirtió que el artículo 3 de dicha ley sería particularmente perjudicial, ya que otorgaría excesivas facultades a un Presidente que, en su opinión, “no escucha a la gente”. Subrayó además que el gobierno actual presta poca atención a problemas críticos como la falta de alimentos para niños y la escasez de recursos en programas sociales, enfocándose en su lugar en políticas económicas que no abordan las necesidades básicas de la población.