En un año complicado por las elecciones legislativas, el Presidente quiere que las paritarias comiencen a negociarse entre el 18 y el 20% ajustando la inflación al presupuesto 2017. Ya hubo rechazo de las centrales y podría ser un año difícil si no endereza su decisión, o al menos la negocia.
El Gobierno continúa con la política de ajustar la economía y ahora el plan es intentar reducir el porcentaje por el cual se negocien las paritarias en 2017. La idea de Macri, Triaca y Compañía es dirimir sueldos en un 20%, teniendo en cuenta la inflación pautada en el presupuesto.
La inflación que calcula el Gobierno para este año que recién arranca no supera el 18%. Contrariamente con lo que sucedió en el 2016, que superó el 35% y hasta algunas consultoras privadas arrojaron 42 puntos. Esto también está preparado y planificado para el sector privado. La Gobernadora María Eugenia Vidal comenzó con esta metodología de negociación, con los estatales, por ejemplo, de negociar por el 18% con ajuste inflacionario.
Ya el conjunto del movimiento obrero, en representación de sus centrales obreras, como la CTA y la CGT, rechazaron la intencionalidad del Gobierno y se espera que si las paritarias comienzan a complicarse en los próximos meses, haya expresiones de protestas importantes. Esto sucede justo en un año en el que al Gobierno no le conviene poner trabas en estas cuestiones ya que acaba de iniciarse un año electoral que puede ser clave para el Presidente.