* Comunicado redactado por el equipo de Comunicación de la Secretaría de Relaciones Internacionales de la CTA-A-
Su rol como líder indígena en defensa de la comunidad Lenca y los campesinos de Honduras ha sido un ejemplo para el resto de los luchadores sociales en el mundo, al tiempo que su lucha es el legado que heredamos para profundizar las conquistas en favor de los derechos humanos.
El lamentable asesinato de Berta Cáceres es un hecho que desafortunadamente no sorprende en la región y da cuenta de la escalada de violencia en Honduras, declarado por un informe de Global Witness como el país más peligroso del mundo para los activistas del medio ambiente y de la tierra junto con Brasil y Perú. Según el documento, entre los años 2002 y 2014 se registraron un total de 111 asesinatos vinculados a personas defensoras del medio ambiente.
Ante la situación de vulnerabilidad a la que se ven sometidos los luchadores sociales en Honduras en particular y en América Latina en general, expresamos nuestra solidaridad y repudio haciéndonos presentes en la Embajada de Honduras.
Durante la movilización y el acto estuvieron presentes representantes del MTL, MOI, Mesa Coordinadora de Jubilados y Pensionados de la CTA, el Director de Cultura y Bienes Comunes, Mariano Sánchez Toranzo, así como el secretario de Relaciones Internacionales de la CTA Autónoma, Adolfo “Fito” Aguirre, y el secretario General, Pablo Micheli.
También participó activamente la compañera Nora Cortiñas, Madre de Plaza de Mayo-Línea Fundadora y referente internacional de la lucha por los derechos humanos, así como oradores de múltiples organizaciones de defensa de los derechos de los pueblos originarios y los bienes naturales.
Además de tender los más sinceros lazos de solidaridad con el pueblo hondureño, exhortamos al Estado de Honduras a hacer frente ante este cobarde ataque investigando y asegurando la justicia y sanción correspondiente a todos los responsables materiales e intelectuales del asesinato de Berta Cáceres y de todos y todas aquellos defensores y defensoras de derechos humanos que han sido víctimas de la violencia en su actividad. Por último, exigimos el fin a la persecución y criminalización todos los luchadores sociales, defensores de los derechos humanos y la justicia social y ambiental.